En 1978 se celebró el Mundial de Filipinas, disputándose el torneo en Manila. Tras superar las fases previas, las medallas se las disputaron entre Yugoslavia y la Unión Soviética por el Oro, y Brasil e Italia por el Bronce. Ambos partidos se decidieron por un punto. En la final los plavi ganaron por (82-81), liderados por un Dalipagic escogido como el MVP del torneo