La selección de los Estados Unidos confirmó los pronósticos y se convirtió en la heredera de España como reina mundial al batir en la final de la cita disputada en Turquía a la anfitriona por un claro 64-81, gracias al enésimo espectáculo anotador de su estrella, Kevin Durant, que mantuvo a la NBA por encima de la pujanza de otros combinados que aspiraban a sorprender a un equipo sin las principales figuras del campeonato americano.
Y es que hace cuatro años, con un equipo con muchas más estrellas de la NBA (LeBron James, ‘Melo’ Anthony, Dwight Howard, Dwyane Wade o Chris Bosh) que las que el equipo americano presentó en Turquía el ‘Dream Team’ se ‘estrelló’ con un discreto bronce. Dos años después, en los Juegos recuperaron su estatus, con una selección fortísima a la que se había unido Kobe Bryant y que sudó para batir a España.
Por ello, cuando se esperaba que las distancias con la mejor liga del mundo se hubiesen acortado definitivamente, Estados Unidos ha recuperado el oro y el prestigio, con un equipo ‘B’, sin pívots, y sólo con una gran estrella, Kevin Durant, todo un espectáculo en la cita.
El alero de Oklahoma City Thunder se había echado el equipo a las espaldas durante todo el torneo, y en la gran final, volvió a asumir la responsabilidad. Todo lo que se había pronosticado sobre este jugador, se confirmó en suelo turco, y su premio de ‘MVP’ fue merecido. Los de Mike Kryzewski han ganado todos los partidos, y sólo Brasil les plantó cara y rozó la sorpresa.
Durant, máximo anotado esta temporada en la NBA, se quedó cerca de la treintena de puntos y acabó con los sueños de la anfitriona, que resistió hasta el descanso, antes del cual su rival ya había establecido las distancias (32-42). Con su estrella al cien por cien, y un rival, que no pudo imponer su juego, los Estados Unidos recuperaron el cetro mundial tras 16 años, el segundo para un ‘Dream Team’.
El equipo de ‘Coach K’ vivió del enésimo espléndido partido de su estrella. Con el alero inspirado, los americanos resistieron al primer arreón de Turquía, llevada en volandas por el público y donde Hedo Turkoglu intentaba dar la réplica.
Los turcos llegaron a dominar 17-14 tras ocho puntos consecutivos del ala-pívot, con dos triples incluidos, pero fue un mero espejismo, tanto por parte de los anfitriones como de este jugador. Apelando a su físico, los estadounidenses reaccionaron, pese a que en ataque únicamente anotaban de la mano de Durant. Un parcial de 0-11 volteó el marcador y devolvió la iniciativa a los americanos, que ya no la dejaron.
Durant acaba con la final
Turquía intentó resistir a la exhibición de Durant, pero éste hizo nueve puntos consecutivos para permitir que los actuales campeones olímpicos se marchasen a los vestuarios con la medalla de oro bien encarrilada (32-42), pero para acabar con cualquier tipo de emoción, la cerraron al principio del tercer parcial.
Y tuvo que ser, como no, su estrella, el que finiquitase la final. Dos triples seguidos del jugador de Oklahoma City disparó a los Estados Unidos hacia la victoria (32-48). Los turcos, lastrados por el mal partido de sus figuras, se quedaron ‘tocados’, y su público también se fue apagando.
Un ligero amago de reacción de la anfitriona (48-61) fue el último aliento de Turquía. Los americanos no dieron opción y ni siquiera necesitaron más de su estelar alero para mantener la renta sin problemas y conquistar un oro merecido.
*Rose – 8p, 6a.
*Billups – 4p, 3r.
*Iguodola – 4p, 5r.
* Durant – 28p, 5r.
*Odom – 15p, 11r.
Westbrook – 13p, 6r.
Curry – 3p.
Gordon – 0p, 2a.
Gay – 6p, 4r.
Chandler – 0p.
Love – 0p, 1r.
Granger – 0p.
*Tunceri – 7p, 5a.
*Onan – 7p, 1a.
*Turkoglu – 16p, 7r.
*Ilyasova – 7p, 11r.
*Asik – 5p, 4r.
Arslan – 6p, 1a.
Guler – 0p.
Gonlum – 4p, 6r.
Savas – 3p.
Erden – 9p, 2r.
Akyol – 0p.
Ermis – 0p.